domingo, 15 de febrero de 2009

caraquiando el NO



LA PREGUNTA ES:


¿Aprueba usted la enmienda de los artículos 160, 162, 174, 192 y 230 de la Constitución de la República tramitada por la Asamblea Nacional que amplía los derechos políticos del pueblo con el fin de permitir que cualquier ciudadano o ciudadana, en ejercicio de un cargo de elección popular, pueda ser sujeto de postulación como candidato o candidata para el mismo cargo por el tiempo establecido constitucionalmente dependiendo su posible elección exclusivamente del voto popular?



LA RESPUESTA SERÁ:

Oh, ¿qué será?, ¿qué será?...



2 comentarios:

Lerryns dijo...

Bueno, como bien sabes, la respuesta que dio este país fue un Sí embriagado, necio, ciego pero sobre todo lleno de chantaje y clientelismo.
Estamos más cerca de ti ahora... muy cerca.

TQM

la sonrisa del calabacín dijo...

Bien mirado y comparado, pareciera, que lo votado es sumamente normal. Aquí mismo podríamos elegir, cuantas veces quisiéramos, al mismo presidente para secundar sus proyectos e ideas. Pero allá... ¿Dónde reside el peligro de esta nueva reforma? En la personalización del acto. El sí o el no, no sólo implicaba el futuro de un país, léase, su población, sino, y sobre todo, ¡el futuro político de un señor!. (Palabra del señor.) Y este ego entronizado es lo que realmente da miedo...
Para lo que necesitéis, aquí estoy.
Un abrazo y ánimo!
T